El casco integral es ideal para quienes buscan máxima protección. Cubre toda la cabeza y el rostro, ofreciendo una seguridad excepcional en caso de accidente. Además, su diseño aerodinámico reduce el ruido y mejora la estabilidad a altas velocidades.

Para quienes prefieren la versatilidad, el casco modular es la opción ideal. Combina la seguridad de un casco integral con la comodidad de poder levantar la mentonera. Esto facilita la comunicación y permite tomar un descanso sin necesidad de quitarse completamente el casco.

El casco abierto, también conocido como Jet, es perfecto para el uso urbano. Ofrece una sensación de libertad y frescura, ideal para climas cálidos. Aunque proporciona menos protección que los integrales, es muy cómodo y fácil de usar en trayectos cortos.

Si eres amante del motocross o del enduro, el casco off-road es indispensable. Diseñado con materiales ligeros pero muy resistentes, protege contra impactos y salpicaduras de lodo. Su visera amplia y sujeción firme aseguran una experiencia segura y cómoda en terrenos difíciles.

Los cascos urbanos combinan estilo con funcionalidad. Son ligeros, aerodinámicos y ofrecen buena ventilación, perfectos para desplazamientos diarios en la ciudad. Algunos modelos incluyen visores solares integrados y sistemas de ventilación avanzados para mayor confort.

Diseñados para maximizar el rendimiento aerodinámico, los cascos racing son la elección de los pilotos profesionales y entusiastas de la velocidad. Su estructura ligera y su forma aerodinámica reducen la resistencia al viento, mejorando la estabilidad y el confort a altas velocidades.

Para los aficionados al estilo clásico, los cascos vintage ofrecen un diseño retro con las últimas tecnologías en seguridad. Su apariencia nostálgica se combina con materiales modernos que garantizan protección contra impactos y una experiencia de conducción segura y cómoda.